ABACA
DESCRIPCIÓN
BOTÁNICA.
RIZOMA O
BULBO.- Llamado comúnmente cepa, produce una yema vegetativa
que sale de la planta madre y sufre un cambio anatómico y morfológico de los
tejidos y al crecer diametralmente forma el rizoma que alcanza una considerable
altura.
Al dar
origen a la planta, en la zona interna se originan las raíces y yemas
vegetativas que serán los nuevos retoños o hijos. Cada planta nace en forma de
brote y crece en la base de la planta madre o tallo principal de la cual
depende para su nutrición hasta cuando produce hojas anchas y se
autoabastece.
SISTEMA
RADICULAR.- Posee raíces superficiales se distribuye en una capa
de 30 a 40 ctms. y se encuentra mayor concentración d e raíces en la capa de 15
a 20 cmts.
Las raíces
son de color blanco, tiernas cuando emergen y se vuelven amarillentas y duras,
su diámetro oscila entre 5 y 8 mm., la longitud varía y puede llegar de 2,5 a 3
mts. en crecimiento lateral y hasta 1,5 mt. de profundidad. El poder de penetración
de las raíces del abacá es débil, su distribución radicular está relacionada
con la textura y estructura del suelo.
SISTEMA
FOLIAR.- Las hojas del abacá se originan del punto central de
crecimiento o meristema termina), situado en la parte superior del Bulbo. Luego
se nota precozmente la formación del pecíolo y la nervadura central terminada
en filamento, lo que será la vaina posteriormente. La parte de la nervadura se
alarga y el borde izquierdo comienza a cubrir el borde derecho, los cuales crecen
en altura y forman los semilimbos. La hoja se forma en el interior del
pseudotallo.
La hoja
emerge enrollada en forma de cigarro. Una vez que ha salido la tercera parte de
la longitud, la presencia de la coloración verde o pigmentación clorofílica se
hace inmediatamente.
INFLORESCENCIA.- La yema floral es corta y cónica, este
cambio en el punto de crecimiento marca el comienzo del crecimiento del tallo
verdadero que ha permanecido a ras del suelo y se convertirá en un tallo aéreo
y crecerá por el centro del pseudotallo. Las células de la yema floral
continuarán creciendo longitudinalmente y hacia arriba por la parte central del
pseudotallo para emerger por la parte superior de la planta.
MANEJO DEL CULTIVO
Requerimientos de clima y suelo
El
abacá tiene un ciclo de producción perenne. Al principio, le toma de 18 a
24 meses en producir, y después el producto se puede cosechar cada dos o tres
meses. Para obtener mejores resultados, el abacá se puede cultivar en
regiones con condiciones óptimas.
Las mejores
regiones para cultivar abacá son esas con clima tropical húmedo y
temperaturas que varían de 22-28°C (70-80 °F. Adicionalmente,
la precipitación fluvial es sumamente importante.
Debe
recibir 1,800 mm a 2,500mm de agua (100 a 160 pulgadas) bien distribuidas
durante todo el año. Otro nivel del mar. La humedad y la luz del sol son dos
factores esenciales para la producción de abacá.
Un exceso
de luz solar combinado con una falta de humedad pueden afectar adversamente el
desarrollo de una planta regular al punto de acabar con el valor de la
producción. En un ambiente adecuado para crecimiento, una plantación de abacá
puede tener un período de producción de 15 a 20 años.
Época y densidad de siembra
La época más propicia para realizar la siembra es a inicio de la
estación invernal; sin embargo, se puede sembrar en otra época, siempre y
cuando el suelo tenga la humedad suficiente. La densidad de siembra depende de
las condiciones del terreno; se han obtenido buenos resultados sembrados
a distancias de 3x3, 3.5x3.5 y 4x4 metros
LABORES CULTURALES
Coronas.- Después
de la siembra, se efectúa una corona de hacha con el fin de eliminar todos
aquellos troncos que no han sido destruidos con la socola y que impiden
un desarrollo normal de la planta. Una vez que ha crecido la planta, durante la
formación de las misma, se realizan de 3 a 4 coronas por año; esta labor
consiste en limpiar la base de tallo para mantenerla libre de malezas.
Deshije.- Sobre
esta práctica existen diversos criterios; para algunos, él deshije reduce la
producción por lo que mantienen una densidad de 20 a 25 tallos por cada planta,
dando como resultado un tallo delgado. Otros dejan de 6 a 8 tallos por planta,
por lo que se encuentra tallos más grandes con mayor porcentaje de fibra.
Está demostrado
que el mayor o menor número de tallos en una planta no influye de gran forma en
la producción. La ventaja del deshije es que durante la cosecha, el número de
tallos a cortar es menor, incidiendo directamente en los costos de producción,
Además, al eliminar los “hijos malos de agua” se está disminuyendo la
competencia entre ellos y los tallos productores.
El primer
deshije se realiza a los 6 meses. Dos o tres deshije más deben efectuarse entre
lo 6 y los 18 meses, época en la que realiza el primer corte. Este deshije debe
de realizarse tratando siempre de dejar despejado un sitio o “ventaja” por
donde se cosechará en el futuro el tallo principal.
Deshoje.-
Simultáneamente con la labor de deshije, se debe realizar también el deshoje,
que consiste en eliminar todo el material que se considera indeseable, ya que
lo único que se hace es darle luz y aire a la plantación.
Chapeas o
Deshierbas.- Hasta que el cultivo se desarrolle adecuadamente, es
decir cubriendo los espacios dejados entre las plantas, es necesario
realizar 5 o 6 deshierbas hasta la primera cosecha. Después se limpiara una vez
antes de cada cosecha. Las chapas o deshierbas se realizan en unos casos en
forma natural y en otros con químicos, (herbicidas o matamalezas).
Productividad.- La duración
de la plantación depende principalmente de la naturaleza del terreno y de los
cuidados que se le prodiguen. Se estima que un cultivo de abacá produce
comercialmente hasta los 15 o 25 años.
La
producción en fibra seca y limpia está alrededor de 1.1% al 2% del peso del
tallo. Todo el tallo tiene un peso promedio de 50 a 70 Kilos. Basados en
estos datos se calcula una producción anual por hectáreas de 1.1 a 2 toneladas
métricas de fibra de abacá.
Cosecha.- El
tiempo que demora una plantación, entre la siembra y la cosecha, depende de
varios factores entre ellos: la naturaleza del terreno, variedad, selección de
la semilla, condiciones climáticas, labores culturales, etc. Pero en general,
de la plantación a la primera cosecha hay entre 18 y 24 meses.
El momento
propicio para iniciar el corte, es cuando la inflorescencia empieza a formarse.
No se recomienda antes ni después de presentar está condición la planta, ya que
se desmejora la calidad y la producción de la fibra se reduce.
Fertilización.-
En los cultivos de abacá del Ecuador se ha llegado a determinar que los
elementos minerales indispensables y que deben ser aplicados al suelo son el
Nitrógeno y el Potasio.
La
fertilización debe ser adecuada y de acuerdo a las diferentes zonas o regiones
variando la cantidad de fertilizantes a aplicarse.
El
fertilizante debe ser aplicado en la zona de máxima de absorción, es decir, más
o menos desde la base de la planta hasta 1 mt. hacia fuera en semicírculo y
alrededor del hijo seleccionado para producción.
Para favorecer
una fertilización racional y completa, que es lo que exige el abacá y por las
características tan especiales de crecimiento, las cantidades de fertilizantes
distribuidas en 4 aplicaciones por año, tomando en cuenta también la
disposición del riego y él numera de labores de cultivo, son las más
recomendables para un buen aprovechamiento del producto por parte de la planta.
Las dosis
de fertilizante a ser repartida por planta es 16 onzas de UREA al 46% y 8 onzas
de Muriato de Potasio al 60%. Se mezclan los productos para realizar una
aplicación conjunta cada vez y ahorrar la mano de obra.
Los
fertilizantes deben ser aplicados en media luna hacia el hijo y nieto.
El uso de
abonado orgánico es adecuado en este cultivo no sólo porque mejora las condiciones
físicas del suelo, sino porque aporta elementos nutritivos. Entre los efectos
favorables del uso de materia orgánica, está el mejoramiento de la estructura
del suelo, un mayor ligamiento de las partículas del suelo y el aumento de la
capacidad de intercambio.
Manejo de
malas hierbas
En los
cultivos de abacá el control de las malas hierbas resulta un grave problema.
Debido al sistema radical superficial de la abacalera, es importante reducir la
competencia con las malezas.
El control
manual es la forma tradicional de controlar las malas hierbas aunque requiere
mucha mano de obra y presenta elevados costes, además presenta el inconveniente
de que en climas lluviosos las malezas se recuperan rápidamente.
En la
lucha química se utilizan herbicidas de contacto contra gramíneas empleando
productos como Paraquat y herbicidas sistémicos como Glisofato. Se puede usar
Diquat cuando hay presencia de malezas de hoja ancha. Si hay malezas
enredaderas como Ipomeas se utilizará Ametrima a dosis de 2.5 kg/ha.
PLAGAS Y
ENFERMEDADES
PLAGAS
Los
nematodos.- Son gusanos de tamaño muy pequeño que viven
generalmente en el suelo, por lo menos una parte de su existencia; algunos son
parásitos de las raíces de las plantas. Los nemátodos parásitos de la planta
del abacá están diferenciados en tres grupos:
1.
Endoparásitos como el Radopbolus similis que causan lesiones profundas en las
raíces.
2.
Endoparásitos facultativos como el Helicotylenchus multicintus que provoca
lesiones menos profundas; y,
3.
Nemátodos de agallas representado por la especie Meloidogyne.
Cochinilla
algodonosa (Dysmicoccus alazon)
Antiguamente
era la plaga más corriente de las abacaleras, pudiéndose encontrar las
cochinillas debajo de las vainas foliares en el falso tallo, junto al nervio
central de las hojas por el envés y entre los dedos del racimo.
La
cochinilla es de forma ovalada, su cuerpo está segmentado y es de color rosado
al quitarle la borra algodonosa que la protege.
Normalmente
suele salir de sus refugios invernales en primavera, multiplicándose durante el
verano y otoño.
Ácaros (Tetranychus
telarius, Tetranychus urticae)
La araña
roja suele localizarse en el envés de las hojas a lo largo del nervio central,
cerca del racimo, notándose su presencia por unos puntitos de color rojo junto
con las telas de araña y los huevos.
ENFERMEDADES
El cogollo racemoso del banano (BBTD) es la enfermedad
viral más importante que ataca al abacá en todo el mundo. A finales del siglo
pasado, se presentaron devastadoras epidemias. Esta enfermedad, representa el
principal problema que afecta la productividad del género Musa en muchas áreas
del Sureste de Asia y en el Pacífico. El cogollo racemoso del abacá, el cual es
una enfermedad casi idéntica al BBTD, ha sido encontrado en Musa textiles en
plantaciones de Ecuador.
Mal de panamá o "veta amarilla"
Es la
enfermedad más grave que ataca al abacá y está causada por el hongo Fusarium
oxysporum f. sp. Cubense. es sólo relativa, viéndose disminuida por
factores adversos del medio, tales como frío, suelos de textura arcillosa, mal
drenaje y poco fondo, empleo de aguas salinas en el riego, etc.
Ahongado
del abacá
Causado por el hongo Verticillium o Stachyllidium
theobromae, que produce una necrosis en la punta de los plátanos que se
asemeja a la ceniza de un puro.
Se evita mediante desflorillado, que es la operación de
cortar los pistilos de las flores, aproximadamente a los doce o quince días de
nacer la piña.
Un buen control del hongo se consigue con pulverizaciones
dirigidas al racimo con alguno de los productos siguientes:
§ Benomilo 50 %, a 60-80 g/Hl.
§ Tiabendazol 60 %, a 150 g/Hl.
Enfermedad de moko (Pseudomonas solanacearum)
Se trata de una marchitez bacteriana del plátano que está
tomando cada vez más incidencia en todo el área del Caribe. Esta enfermedad
se distribuye en la plantación por las herramientas de trabajo infectadas, por
tanto se recomienda una desinfección de las mismas con una solución de fenol al
15%. Se recomienda la pulverización de aceites minerales después del corte de
los rizomas expuestos
Población: 1500 plantas/ha
RECOMENDACIONES DE FERTILIZACION
|
|
g/Planta
|
|
N
|
P2O5
|
K2O
|
Baja
|
150
|
100
|
300
|
Media
|
100
|
80
|
150
|
Alta
|
50
|
40
|
50
|
Establecimiento del cultivo:
Aplicar en el fondo del hueco, donde se va a
plantar, toda la cantidad de fósforo y la mitad de Potacio; tapar el
fertilizante con una cantidad de 2 a 35 cm de suelo (tierra) y proceder a
plantar, es recomendable hacer una aplicación de Enraizante al momento de la
siembra, ya que de esta manera nos ayuda a que rápido haya una buena maza
radicular. Se puede hace palicaciones de materia orgánica como humus de
lombriz, compost, o estiércol de ganado descompuesto, para de esta manera dar
una mayor carga de micro flora y fauna al suelo.
Mantenimiento de cultivo:
Las recomendaciones de fertilización dadas en
el cuadro deben dividirse en las partes que el técnico lo recomiende.